El cuadro cuchero encontró el gol en el tramo final del partido.

No fue un partido brillante ni el más vistoso, pero sí suficiente para que el Limeño lograra una victoria de lujo que le permite seguir escalando en la tabla. Los cucheros se impusieron por la mínima a un Inter FA que sigue naufragando en la irregularidad y sin respuestas claras en su juego.
El encuentro fue ríspido, con pocas ocasiones y más intentos por los extremos que oportunidades claras de gol, sobre todo en un primer tiempo muy parejo.
Además, el partido volvió a registrar un retraso, como ya se ha vuelto habitual cada vez que el Limeño juega de local. Las luces del estadio Flores Berríos fallaron de nuevo y la reanudación del segundo tiempo tuvo que esperar varios minutos, convirtiendo al estadio en protagonista por problemas técnicos en el único partido jugado el sábado por la fecha 10.
Con el arranque del segundo tiempo, el cuadro cuchero comenzó a presionar a un Inter FA que mostraba poca profundidad ofensiva y se limitaba a intentar aprovechar errores del local para acercarse al gol.
El Municipal Limeño fue paciente, buscó el momento y lo encontró en el tramo final de un partido con pocos momentos memorables, pero suficientes para asegurar los tres puntos que le permiten mantenerse en la lucha por la clasificación.
El gol llegó tras un mal rechazo de la defensa interista: Enmanuel Hernández cabeceó y, con un globito preciso, dejó mal parado al portero visitante para el 1-0 definitivo.